Hilux eléctrica con celdas de combustible
Toyota ha alcanzado otro hito en su progreso hacia un futuro sin emisiones de carbono con la presentación del prototipo de Hilux eléctrica de celdas […]
Toyota ha alcanzado otro hito en su progreso hacia un futuro sin emisiones de carbono con la presentación del prototipo de Hilux eléctrica de celdas de combustible basadas en hidrógeno.
Su debut es una demostración más del compromiso de la marca con su estrategia de electrificación, que busca lograr una movilidad libre de carbono, aplicando diferentes tecnologías como la híbrida eléctrica (HEV), híbrida eléctrica conectable (PHEV), eléctrica de celdas de combustible basadas en hidrógeno (FCEV) y los 100% de batería eléctrica (BEV), para adaptarse a las diferentes necesidades de los clientes y entornos operativos en todo el mundo.
El nuevo tren motriz utiliza elementos clave del sedán de celdas de combustible de hidrógeno (FCEV): Toyota Mirai. Con una tecnología que ha demostrado su calidad en casi 10 años de producción comercial. Cuando se conduce, las celdas de combustible no producen emisiones de escape, únicamente generan agua pura. El hidrógeno se almacena en tres tanques de combustible a alta presión, lo que le da al prototipo de Hilux, un rango de autonomía de más de 600 km, significativamente más de lo que se podría lograr con un sistema 100% de batería eléctrica. La batería híbrida que almacena la electricidad producida por las celdas de combustible basadas en hidrogeno, mientras se conduce, se encuentra ubicada en la batea, evitando con ello la pérdida de espacio en la cabina.
La construcción del prototipo comenzó el 5 de junio de este año, siguiendo los principios del Sistema de Producción Toyota en un área dedicada dentro de las instalaciones de TMUK. El primer vehículo, de los 10 que se desarrollarían para finales de este año, se completó tan solo tres semanas después. Estos se someterán a pruebas rigurosas para garantizar que la seguridad, rendimiento dinámico, funcionalidad y durabilidad cumplan con los altos estándares requeridos en un modelo de producción.