La Evolución de las Pantallas en Renault

Alfonso Medina 05 Jul 2024

Desde el lanzamiento del Clio IV y el ZOE en 2012, el centro del tablero de los vehículos Renault cuenta con una pantalla táctil multimedia. […]

Desde el lanzamiento del Clio IV y el ZOE en 2012, el centro del tablero de los vehículos Renault cuenta con una pantalla táctil multimedia.

Integrados en el tablero de la mayoría de los vehículos modernos, los GPS y las pantallas multimedia empezaron a sustituir a las radios de los vehículos a principios de la década de 2000. Por aquel entonces, se manejan “manualmente”, mediante una rueda selectora o un joystick. Después, para mejorar la ergonomía y a medida que los avances tecnológicos lo permiten, estas pantallas se hicieron sensibles al tacto.

“Renault empezó a desarrollar pantallas táctiles en 2007, durante la fase de diseño del Clio IV. Al principio, ¡fue difícil convencer a la gerencia de que se pasara a lo táctil! De ahí la redundancia con el control del volante durante mucho tiempo”. Stéphane Maiore, Jefe de Diseño Interior de Renault

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Un joystick al alcance de tu mano

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n 2013 se lanzaron el Clio IV y el ZOE, los dos primeros modelos de Renault que incorporan una pantalla táctil central. En aquel momento, sus pantallas de 7 pulgadas permitían a los conductores controlar el sistema multimedia R-Link y acceder a los ajustes, la radio y la navegación del vehículo de forma centralizada, sólo con la punta de los dedos.

Antes de pasar por completo a las pantallas táctiles, el joystick que se había utilizado anteriormente para controlar las pantallas centrales no táctiles se mejoró ese mismo año con un eje multidireccional para facilitar la navegación en la interfaz multimedia R-Link. Esta novedad se ofreció en Scenic XMOD y en la gama Mégane, mientras que en Espace IV se desarrolló un reposamanos para facilitar el uso del joystick y, por tanto, de la pantalla.

A lo largo de los años, Renault ha desarrollado el uso de pantallas táctiles en el interior de sus modelos, haciéndolas más grandes, más sensibles y más sofisticadas.

“El paso de los joysticks a la pantalla táctil se convirtió rápidamente en una necesidad, para que los usuarios pudieran retomar los hábitos que ya habían adoptado con sus teléfonos o tabletas.” Marc Pinel, Jefe de Diseño de Experiencia Avanzada

Las pantallas táctiles siguen los pasos de los smartphones

Al igual que los smartphones, las pantallas táctiles de los vehículos son cada vez más sensibles a lo largo de los años, incluso más que “detrás del cristal”, los procesadores y la memoria de los sistemas multimedia son cada vez más potentes. El ecosistema que gestiona las pantallas también ha progresado, con funciones avanzadas como la conectividad con smartphones, el control por voz y la compatibilidad con asistentes virtuales. Las aplicaciones integradas también se han multiplicado, para una experiencia enriquecedora y cada vez más personalizada.

2014 marca un cambio importante, en desacuerdo con los estándares automovilísticos de la época: la quinta generación del Renault Espace está equipada con una pantalla táctil vertical -en lugar de horizontal- de 8.7″, de nuevo con el objetivo de ofrecer a los usuarios una experiencia similar al uso de un smartphone. Gracias a la conectividad, esta pantalla permite acceder a las previsiones meteorológicas, a la información sobre el tráfico en tiempo real y a la búsqueda local.

Stéphane Maiore nos remonta a las primeras pruebas: “En 2010, pegamos un IPad al tablero para ver qué podía hacer un formato vertical. Fuimos los primeros en sacar pantallas en este formato con esa orientación”.

Marc Pinel añade: “La idea era mostrar la velocidad de interacción y la ventaja de una pantalla vertical para ver un mapa.”

Este posicionamiento vertical de la pantalla táctil multimedia se extiende rápidamente por la gama: Mégane IV (2016), Koleos II (2017), Clio V (2019) y Captur II (2019) están equipados con ella.

Doble pantalla OpenR: el clímax de la experiencia

Por supuesto, al mismo tiempo, los diseñadores pensaron en el siguiente paso, conscientes de que este tipo de avance no duraría mucho. Las dos tendencias ineludibles de la época eran la llegada de una segunda pantalla en el tablero, orientada hacia el conductor, y la exigencia de una ergonomía mejor y más segura.

Esto llevó al desarrollo de una nueva forma de pantalla, que integra tanto la pantalla del tablero como la pantalla multimedia: la “doble pantalla todo en uno” en forma de L invertida (“L-Shape”), probada en vehículos concepto como TreZor (2016), SYMBIOZ (2017) y MORPHOZ (2019).

En 2022, integró por primera vez un modelo de producción, en este caso el Mégane E-Tech Eléctrico. Su nombre: OpenR. Su efecto: impactante.

La pantalla táctil OpenR consta de un panel vertical de 12″ y otro horizontal de 12.3″, que juntos cubren una superficie de 774 cm2.

Funcionalidad, estética y elegancia fueron las tres palabras clave en el diseño de esta pantalla OpenR: “Con la pantalla OpenR, queríamos centralizar un único sistema en un único objeto. Con una pantalla de conducción dedicada y una pantalla multimedia dedicada”, explica Marc Pinel.

Su inspiración dio lugar a una verdadera simbiosis entre el sistema digital y la configuración de la pantalla, donde “todo está en su sitio”.

Más allá de lo práctico, su diseño trasciende el simple “objeto utilitario” para convertirse en una verdadera expresión emocional. Cada vez que se abre la puerta, es esta pantalla la que saluda la mirada: un recordatorio constante de la alianza entre tecnología y estética que define la era Renaulution.

OpenR Link, su sistema operativo, es fruto de esta filosofía. Al simplificar los menús y la navegación por la pantalla, reduce el número de operaciones, ofrece un acceso instantáneo a las funciones esenciales. Un gran avance en ergonomía automovilística, que libera al usuario de limitaciones superfluas.

La experiencia del cliente, motor de la innovación

La verdadera revolución con la nueva forma de la pantalla OpenR reside en comprender y tener en cuenta los hábitos y necesidades de los usuarios.

En esta búsqueda constante de la mejora y la innovación, se adoptó un enfoque práctico para este proyecto: se movilizaron paneles de clientes para probar prototipos de forma rápida y regular.

“Durante la fase de desarrollo del Mégane E-Tech Electric y de la pantalla OpenR, se realizó en el taller una maqueta estática del espacio interior para probarla con usuarios reales”, explica Marc Pinel.

Este enfoque permitió recopilar información valiosa, para poder ajustar los desarrollos en consecuencia, como parte de un proceso de mejora continua”.

Marc Pinel revela que, ante el dilema entre el sistema integrado en el vehículo y sus aplicaciones móviles favoritas, muchos de los clientes de prueba del panel prefieren la comodidad de su smartphone atado al tablero. Para OpenR, la solución era obvia: integrar estas aplicaciones familiares en el ecosistema del vehículo, ofrece una experiencia de conducción más cercana a nuestros smartphones y, sobre todo, impregnada de confianza.

Para entender estas necesidades, hay que sumergirse en el mundo digital, donde las tendencias evolucionan a una velocidad vertiginosa, en marcado contraste con el ciclo de renovación del automóvil.

“Entre el Clio IV y el V, ¡hubo seis generaciones de iPhone!”, recuerda Stéphane Maiore, para ayudarnos a comprender este desfase.

¿Cuál es el futuro de las pantallas táctiles de a bordo?

La pantalla OpenR en forma de doble L invertida, símbolo de innovación hoy en día, no se adapta necesariamente a todas las necesidades ni a todos los vehículos. En el último Renault 5 E-Tech eléctrico, la pantalla de a bordo de 10.1″ y la pantalla multimedia de 10″ están colocadas horizontalmente.

¿Por qué? Para ser coherente con el diseño interior, que presenta un tablero completamente horizontal, y por supuesto por razones ergonómicas.

El dicho “todo viene de tres en tres” cobra todo su sentido al descubrir la nueva pantalla panorámica de tres dimensiones del Renault Grand Koleos, modelo recientemente presentado en el mercado coreano. Esta pantalla táctil sigue siendo horizontal, pero se extiende hasta el pasajero delantero para integrarlo plenamente en la experiencia multimedia a bordo.

“La pantalla puede ser una fuente de distracción, por eso su ubicación es tan importante. Por eso, la próxima generación de pantallas dará prioridad a la seguridad, para minimizar las molestias en la visión periférica.” Marc Pinel

De cara al futuro, la ubicación de la pantalla táctil es un reto clave. Requiere una adaptación constante de la forma, la evolución digital y la experiencia del usuario, de forma óptima y segura.

El futuro de nuestros tableros pasa por una búsqueda perpetua de innovación, adaptación y seguridad, al servicio de una experiencia de conducción cada vez más ergonómica, fluida e intuitiva. Un análisis crítico de nuestros conceptos actuales nos incita a mirar al futuro con lucidez: quizá algún día sea necesario ocultar las pantallas para conciliar accesibilidad y discreción.